CULTURA VIVA

El mito de La Ciguapa

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Lincoln López

Por Lincoln López


Las sociedades humanas por lo general en una etapa primaria de su existencia, ¨Necesitaron crear mitos como una de las formas de la conciencia humana¨. (Ferrater Mora). Esas leyendas se nutren de la imaginación de los pueblos creyentes transmitidas de generación en generación, de manera oral o escrita, donde reflejan sus miedos, sus sueños, sus pesadillas…, y en cierto modo, normaron sus respectivas conductas.


En América Latina tenemos algunas de esas leyendas, curiosamente femeninas, que actúan por las noches y traen consigo algún castigo o maldición. El portal Listverse cita algunas de ellas: La Viudita (América del Sur) que siempre anda sola después de la medianoche, vestida de negro con el rostro cubierto por un velo, que se le aparece a los hombres de los cuales se quiere vengar.


Otros mitos: La Cegua, una mujer hermosa de piel blanca, ojos oscuros y pelo largo negro, que se aparece a los hombres en caminos solitarios y se convierte en bestia con cara de caballo y ojos inyectados en sangre cuando el hombre acepta ayudarla. La Llorona, también una mujer alta y delgada de largo pelo oscuro, que vaga cerca de los ríos y arroyos…


La ciguapa

La sociedad dominicana no fue la excepción, y por tanto, tuvo (¿?) entre sus mitos: La Ciguapa. El mismo ¨apareció¨ como en otras sociedades, primarias y mayoritariamente rurales. Varios de nuestros literatos y artistas visuales se han expresado sobre La Ciguapa: Javier Angulo Guridi (1816-1884) ha sido uno de ellos. La obra fue publicada como novela en 1886. Pero ha sido don Manuel Mora Serrano, Premio Nacional de Literatura 2021, ser uno de los primeros intelectuales que investigó sobre este mito. El mito se podría recrear como sigue:


¨…existen mujeres hermosas, llamadas ciguapas, de pequeña estatura, tez morena, ojos negros y rasgados; con los cabellos suaves, lustrosos y tan largos que son la única vestimenta de sus cuerpos; con las piernas largas y delgadas; y con los pies hacia atrás. Algunas hasta estarían bellamente emplumadas. Las ciguapas serían mujeres salvajes, que poseerían poderes mágicos, a pesar de los cual serían completamente inofensivas y sumamente tímidas -llegando incluso a asustarse de la gente-.


¨Las ciguapas habitarían en las montañas, generalmente en cavernas montañosas, aunque también se las podría localizar en los charcos de los ríos en las noches de luna nueva¨.


¨Las Ciguapas tendrían un corazón de cazador y saldrían por las noches de las serranías en busca o bien de manteca y carne cruda o bien en busca de algún caminante nocturno al que embrujar, amar y luego matar¨… (Conferencia: LO FEMENINO EN LO TAINO… Mon González. 2005).


Analicemos, pues, esas raíces mitológicas y mágicas… hasta las presentes realidades objetivas, enfocadas en la mujer, y, quizás podríamos implementar acciones específicas (Educación y Cultura), para combatir el ANDROCENTRISMO, causante de muchas horrendas inconductas masculinas que se manifiestan contra las mujeres, en la sociedad dominicana de hoy. 

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